Fortalecer la participación para la reconversión agropecuaria y la estabilización de la frontera agrícola
La nueva delimitación de la frontera agrícola
En Junio de 2018, el Gobierno de Colombia —a través de la colaboración entre el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural (MADR), la Unidad de Planificación Rural Agropecuaria (UPRA) y el Ministerio de Ambiente y de Desarrollo Sostenible (MADS)— oficializó el establecimiento de la Frontera Agrícola Nacional. El objetivo de esta medida es reducir la deforestación provocada por la expansión de las actividades agropecuarias en el país. De este modo, el 35 % del área continental de Colombia (aproximadamente 40 millones de ha) ubicado dentro de los límites de la frontera agrícola pasa a destinarse para actividades económicas agropecuarias. El porcentaje restante (ubicado fuera de la frontera agrícola) se destina en su mayoría a la conservación de bosques naturales y otros ecosistemas estratégicos como humedales y páramos.
La nueva delimitación de la frontera agrícola —que se enmarca en la Estrategia Integral de Control de la Deforestación y Gestión de los Bosques— plantea numerosos retos para el sector agropecuario. Particularmente para los agricultores que están fuera de la frontera agrícola y se ven obligados a reconvertir sus prácticas, pero también para aquellos ubicados dentro de la frontera que tienen el reto de aumentar la productividad por hectárea al no poder expandir sur tierras agrícolas. De este modo, con el objetivo de identificar oportunidades productivas y proporcionar orientaciones para el ordenamiento territorial, la UPRA —en colaboración con el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (IDEAM)— ha realizado un estudio para identificar las zonas más aptas para el desarrollo de actividades agropecuarias dentro de la frontera agrícola.
Con el fin de mantener las actividades agropecuarias dentro de los límites de la frontera agrícola y al mismo tiempo acelerar la transición hacia sistemas productivos más adecuados, la UPRA está trabajando en una serie de planes maestros de reconversión agropecuaria para distintos sectores. Estos planes se vincularán después con otros instrumentos sectoriales y territoriales, como los planes de ordenamiento productivo departamental.
2021, año clave para la reconversión agropecuaria
Uno de los objetivos principales de la UPRA para el bienio 2020-2021 es disponer de cinco planes de reconversión para el sector arrocero (correspondientes a cinco zonas productoras: Bajo Cauca, Llanos, Centro, Costa Norte, Santanderes). Para lograr este objetivo, expertos del equipo de reconversión productiva de la UPRA, en colaboración con el Instituto Forestal Europeo (EFI) y con distintos actores del sector arrocero, están utilizando el Land-use Planner para generar escenarios prospectivos de reconversión agrícola.
Esta colaboración entre la UPRA y EFI concretó en un proyecto piloto que abarca dos departamentos: Tolima y Sucre (en las zonas del Bajo Cauca y la Costa Norte, respectivamente).
Departamento del Tolima y frontera agrícola
Ubicación del departamento del Sucre y frontera agrícola
El objetivo del proyecto era obtener una panorámica de los impactos potenciales de los cambios de uso del suelo a lo largo del tiempo. Otro punto importante era facilitar el diálogo entre productores e industriales del sector, con el fin de alcanzar consensos sobre el futuro de la cadena de suministro del arroz en ambos departamentos. El análisis incluía además criterios que los productores e industriales no suelen tener en cuenta, como son las emisiones de gases de efecto invernadero o la pérdida de biodiversidad o de cobertura boscosa. Se incluyeron también indicadores sociales como la creación de empleo o la mejora de la seguridad alimentaria. Estos elementos facilitaron la elaboración de una hoja de ruta para el sector arrocero en los departamentos de Tolima y Sucre, así como lineamientos técnicos para el manejo del territorio. El proyecto piloto también permitió evaluar la posibilidad de usar el LUP para otros planes maestros de reconversión agrícola y de que el equipo de ordenamiento territorial de la UPRA empiece a usarlo.
La producción de arroz en Tolima y Sucre
En los últimos años, el sector arrocero en los departamentos de Tolima y Sucre se ha caracterizado por una escasa expansión de las áreas de producción, aunque con diferencias importantes de rendimiento entre zonas en ambos departamentos. Los productores e industriales del sector validaron los escenarios prospectivos siguientes:
- Expansión del cultivo de arroz en áreas con pocos conflictos por el uso de la tierra, pero al mismo tiempo retroceso del cultivo en zonas con un aumento de los conflictos relativos a la tierra, donde el arroz se vería reemplazado por otros usos.
- Mejora de los rendimientos en zonas donde actualmente persisten prácticas manuales o poco mecanizadas, pero que se beneficiarán de inversiones públicas, privadas y mixtas.
- Respecto a las alternativas a la producción de arroz, en Tolima se identificaron principalmente la soja y el maíz, y en Sucre la ganadería de doble propósito.
- En el escenario basado en la situación actual de ambos departamentos, se produce deforestación causada por la expansión de la ganadería, pero más adelante se implementan estrategias de reducción de la deforestación y de protección de los humedales (Sucre) y páramos (Tolima).
Dado que los diálogos se dieron entre actores del mismo sector, las visiones se alinearon lo suficiente como para que ninguna de las partes tuviera que hacer concesiones importantes dentro de los distintos escenarios. No obstante, hubo tres elementos que generaron debates y reflexiones y llevaron al grupo a proponer alternativas o alcanzar compromisos:
- El cambio climático y estacional y la necesidad de adaptarse para mantener (si no aumentar) los rendimientos (inversión en mecanización, mejora de los sistemas de irrigación, etc.).
- En el departamento de Sucre, la posibilidad de alternar entre producción de arroz y ganadería en ciclos rotatorios de 5 años, con el fin de aumentar los ingresos de los productores, mejorar la productividad de los suelos y limitar la expansión de ambos usos en los humedales. Este modelo se ha aplicado en otros países, pero no en Colombia, por lo que se necesita información adicional para evaluar mejor los impactos mediante el Land-use Planner.
- La necesidad de ir hacia sistemas de producción sostenibles en los dos departamentos para limitar la pérdida de ecosistemas clave como son los humedales y páramos.
Perspectivas
A lo largo de 2021, la UPRA trabajará en la formulación de planes maestros de reconversión de los sectores de la leche y la carne. Dos sistemas productivos que son motores de deforestación y generan conflictos importantes por el uso de las tierras. En este contexto, el Land-use Planner mostraría todo su potencial como herramienta de participación y diálogo. La apropiación del Land-use Planner por parte de los expertos de la UPRA facilitará la realización de análisis prospectivos en distintos territorios y departamentos, además de favorecer el intercambio y la divulgación de los resultados.